Día 20: Judá y Tamar
INTRODUCCIÓN
"Hoy con el génesis seguiremos mirando como José es ahora el preferido por Putifar, por el mismo que lo ha comprado y también vamos a ver como José tiene una fuerza voluntad interesante. Él se resistente a la tentación. Un llamado a todos los que estamos siguiendo este podcast, la tentación siempre está ahí. La tentación nos la ponen al frente nuestros amigos, a veces nuestra propia familia o las circunstancias, pero podemos resistir la tentación. Nos damos cuenta como José simplemente por ser valiente, por ser fuerte, por resistirse a la tentación, sufre una falsa acusación por una mujer, una amante. Lo encarcelan y él cree que va a ser su final. Se le olvida que Dios está con él; y ¡Dios está allí con él en la cárcel!
Este capítulo está totalmente ocupado por asuntos relacionados a cosas que parecen muy macabras y oscuras:
- Hay relación con los cananitas, justo lo que Dios había hecho que no quería que pasara.
- Vamos a ver cómo hay un insecto con una nuera. Hay resentimiento contra ella.
- Hay nacimientos, hay gemelos.
¡Unas historias interesantes! No sé si a usted le está llamando la atención este podcast, pero ¡guau! para mí cada día está más emocionante." (Fray Sergio)
ORACIÓN INICIAL
"Padres de amor y misericordia que hoy podamos aprender a dar con generosidad. Que aprendamos a hacer siempre el bien a nuestros hermanos; pues Tú nos has dicho que debemos amarte a Ti y amar a nuestro prójimo. Es por eso que quisiéramos hoy reparar cualquier daño que hayamos hecho, que no envidiemos el corazón de los violentos que a veces parecen que van ganando y que parecen amasar grandes fortunas. Pero sabemos Señor que Tú nos invitas a tener una conducta diferente a la de esas personas, pues Tú los aborreces porque quieres apoyar siempre a los que van por buen camino. Así que hoy, Señor, a través de esta lectura enséñanos a caminar por tus sendas para que podamos ser fieles, para que podamos seguir siempre Tu camino, para que no nos dejemos llevar de las ilusiones que el mundo a veces nos presenta. Por eso hoy, Señor, quiero pedirte que envíe Tu Espíritu Santo sobre cada uno de nosotros para que abras nuestros corazones, para que abras nuestras mentes y para que podamos gozar hoy de Tu santa Palabra, esta palabra que nutre nuestras vidas hoy. A Ti Señor te pido también que hagas elocuente mi lengua así como haces elocuente la lengua a los niños, educa también la mía e infunde en mis labios la gracia Tu bendición, que es la del Padre, la del Hijo y la del Espíritu Santo. Amén." (Fray Sergio)
PUNTOS CLAVES
Seguimos con el Génesis, con esta historia de Israel y de Jacob que ahora se llama Israel. Vemos todo este desenlace de una familia, que no es un ejemplo de familia. Tiene toda la cantidad de problemas, habidos y por haber y hoy nos damos cuenta de que esta mujer, Tamar, está casada con el primogénito y éste muere. Muere porque este hombre no ha agradado a Dios, no es del agrado de Dios. Judá entrega por mujer a su segundo hijo, pero ésta tampoco puede sacar descendencia con este hijo. Parece que vertía toda la tierra, lo cual molesta a Dios y Dios también termina quitándole la vida. ¿Cuántas veces nosotros detenemos esa obra maravillosa de la procreación, donde Dios quiere dar vida?
Hoy Judá se vuelve indolente contra esta mujer y le dice “vete hasta que mi otro hijo crezca.” En la antigüedad era obligación de los hermanos dar descendencia a aquellos hermanos que morían sin poder tener hijos. Les correspondía esta obligación y Judá tiene miedo, tal vez de que su hijo menor muera. Por eso dice bueno ella que siga por su camino y mi hijo que se quede aquí conmigo. La mujer le juega una trampa. Cuando Judá viajaba se encuentra con Tamar, pero pensó que era una prostituta. Ella muy astutamente le pide que le deje unos signos muy personales y él acepta, porque no traía la paga para dársela en ese momento. Él le dice “bueno te mandaré el animal que me estás pidiendo y tú me dará mis cosas” y ya lo acepta, pero era una trampa. Esta mujer queda embarazada y se produce un desenlace bastante fuerte. ¿Cuántos errores no hay en nuestras familias? ¿Cuántos enredos no hay? ¿Cuántas traiciones en el mundo de hoy? ¿Cuántas locuras no conocemos?
Hoy Tamar da a luz gemelos. Lo único que podía hacer falta, que hay un engaño, que hay una mentira y ahora el premio viene doble; dos hijitos que van a nacer inocentes de cualquiera de las cosas que su padre o su madre han hecho; y un Dios, que es un Dios de vida, que bendice los vientres, que bendice con vida.
Así empieza esta historia a tomar un desenlace, bastante impensable. ¡Esto está mejor que cualquier novela! Hoy vemos qué se han mezclado las familias con cananitas, que hay caminos que no sabían seguir y los hombres los ignoraron y decidieron seguirlos e ir en contra de Dios.
Judá se da cuenta de que lo que ha hecho es vergonzoso y es necesario ocultar lo que está pasando. No puede soportar que perdió su sello, su báculo y en vez de dejar que la gente sepa esto, él quiere tapar todo su error. Judá lo que hace es que se aparta y nunca más vuelve a tener trato con ella. Dos personas que se hacen daño y que ahora se alejan el uno del otro. Bastante difícil, pero tenemos el nacimiento de dos personas que tal vez van a traer alegría a esta familia.
Miremos un poquito lo que está pasando con Job. Nos damos cuenta también que reconoce que la fuerza de Dios es muy grande. Dice: “bueno yo me he dedicado a hacer lo que Dios me pedía y sin embargo no me está yendo también como me lo hubiera imaginado.” El ha ayudado al huérfano, a la viuda, era la voz que aconsejaba y ahora todo el mundo se burla de él, hacen manifiestos en su contra. Nada diferente a lo que está pasando en nuestro mundo hoy. Los estudiantes se burlan de los profesores, los hijos se burlan de los padres, parece que el mundo estuviera al revés.
Hoy es una clara imagen de lo que está pasando con Job. Las cosas están al revés. Él no lo entiende. Es un hombre justo, es un hombre bueno y todo está en su contra. A veces pensamos ¿por qué a la gente buena le pasan cosas malas? Vemos cómo toda esta gente buena –aunque le estén pasando cosas malas y difíciles– se mantienen fieles a Dios ¡Qué gran ejemplo para cada uno de nosotros! ¿Cómo podemos nosotros alcanzar la santidad y darnos cuenta que nuestra confianza definitivamente tiene que estar puesta pues en el Señor?
Job nos deja claro en este largo discurso que no ha recibido ayuda de ninguno de sus amigos. Nadie le llegó. Job expresó entonces que su fe no estaba en las personas, no estaba en nadie, si no seguía en Dios, en su creador. Él no sucumbe ante tantos ataques. Él dice, “todos me pueden atacar, pero yo no puedo atacar a Dios y seguiré siendo fiel a Él.”
Los amigos de Job lo dejan solo, entonces veremos como Job sufre y tal vez es un caso grave cuando nos sentimos atacados en nuestro ego. Tal vez es una enfermedad que tenemos hoy, cuando dejamos que el orgullo nos domine, cuando dejamos que sea el odio, el rencor, la venganza, que nos van acabando los momentos de alegría y de paz queremos tener. Los amigos de Job vimos que no fueron capaces realmente decir: “Job, vamos a buscar cuál es la raíz de tus problemas y vamos a darte la mano.” No, simplemente se alejaron. La gente nos deja muy fácilmente. Hay muchos memes hoy en día que dicen que a los amigos se conocen en los malos tiempos. Hoy Job se dio cuenta quiénes eran sus amigos. Todo gira alrededor de los que se están jactando. Él mismo se jacta y vemos cómo su corazón se quebranta, su espíritu se quebranta. El está contrito, él no admite culpa pues no la tiene, pero sí siente que hay un gran fracaso en su vida. Nadie es capaz de ayudarlo. Nadie puede percibir su verdadero problema. No conocían realmente a Job, no conocían a Dios y creen que es Dios el que envía el sufrimiento a Job y que lo está castigando. Pensaron que Job estaba resistiéndose de todo lo que Dios le hacía y actuaron con mucha dureza en contra de él. En vez de consolarlo lo hacen sentir triste. Cada uno de ellos usa un enfoque diferente y sin embargo todos llegan a la conclusión de que el problema es Job.
No se dan cuenta que muchas veces el sufrimiento que tú y yo llevamos, que nuestra familia lleva es accidental. No es Dios –quien nos está castigando– nos está mandando cosas malas. Así que hoy con estos capítulos hemos examinado cómo a veces los seres humanos somos orgullosos. Lo fue Judá, los amigos de Job y, tal vez la gran enseñanza es que hoy deberíamos acercarnos con un corazón más humilde a Dios. Más que criticar a otros, reconociendo nuestro propio pecado. Tal vez reconociendo que con el pecado lo único que hemos hecho es alejarnos de Dios. Ojalá que cada uno de nosotros pudiera tomar su cruz y contemplar cómo Cristo se humilló por nosotros y murió en nuestro lugar. No tenía un corazón altivo, sino era un corazón humilde y sencillo.
Por eso hoy estamos llamados a esta humildad. A decirle: “Señor tal vez nos hemos equivocado, hemos juzgado mal. Hemos cometido tantos errores como Judá o como los amigos de Job, pero sabemos como Job, que Tú eres un Dios fiel y que no nos podemos alejar de ti porque lejos de ti no somos nada."
RECAPITULANDO
¿Cuántas veces nosotros –actuando como Onán– detenemos esa obra maravillosa de la procreación, donde Dios quiere dar vida?
¿Cómo podemos nosotros alcanzar la santidad y darnos cuenta que nuestra confianza definitivamente tiene que estar puesta pues en el Señor?
Más que criticar a otros, reconozcamos nuestro propio pecado, reconozcamos que con el pecado lo único que hemos hecho es alejarnos de Dios.
Tomemos nuestra cruz y contemplemos cómo Cristo se humilló por nosotros y murió en nuestro lugar. No tenía un corazón altivo, sino era un corazón humilde y sencillo.
ORACIÓN FINAL
"Antes de despedirme, quiero que ustedes por favor oren por mí. Para que yo pueda ser fiel a este ministerio que se me ha confiado, para que pueda vivir con fe en lo que leo y lo que trato de enseñar. Para que cuando enseñe, sea la verdad lo que estoy enseñando y para que yo pueda cumplir esa verdad que enseño. Y que la bendición de Dios todo poderoso que es Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre ustedes y los acompañen siempre. No se olviden que hoy pueden alabar, bendecir y predicar con la Palabra de Dios ¡Que Dios los bendiga!" (Fray Sergio)
CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA
Gn 38, 9-11
2368 Un aspecto particular de esta responsabilidad se refiere a la regulación de la procreación. Por razones justificadas (GS 50), los esposos pueden querer espaciar los nacimientos de sus hijos. En este caso, deben cerciorarse de que su deseo no nace del egoísmo, sino que es conforme a la justa generosidad de una paternidad responsable. Por otra parte, ordenarán su comportamiento según los criterios objetivos de la moralidad: «El carácter moral de la conducta [...], cuando se trata de conciliar el amor conyugal con la transmisión responsable de la vida, no depende sólo de la sincera intención y la apreciación de los motivos, sino que debe determinarse a partir de criterios objetivos, tomados de la naturaleza de la persona y de sus actos; criterios que conserven íntegro el sentido de la donación mutua y de la procreación humana en el contexto del amor verdadero; esto es imposible si no se cultiva con sinceridad la virtud de la castidad conyugal» (GS 51).
2369 “Salvaguardando ambos aspectos esenciales, unitivo y procreador, el acto conyugal conserva íntegro el sentido de amor mutuo y verdadero y su ordenación a la altísima vocación del hombre a la paternidad” (HV 12).
2370 La continencia periódica, los métodos de regulación de nacimientos fundados en la autoobservación y el recurso a los períodos infecundos (HV 16) son conformes a los criterios objetivos de la moralidad. Estos métodos respetan el cuerpo de los esposos, fomentan el afecto entre ellos y favorecen la educación de una libertad auténtica. Por el contrario, es intrínsecamente mala “toda acción que, o en previsión del acto conyugal, o en su realización, o en el desarrollo de sus consecuencias naturales, se proponga como fin o como medio, hacer imposible la procreación” (HV 14): «Al lenguaje natural que expresa la recíproca donación total de los esposos, el anticoncepcionismo impone un lenguaje objetivamente contradictorio, es decir, el de no darse al otro totalmente: se produce no sólo el rechazo positivo de la apertura a la vida, sino también una falsificación de la verdad interior del amor conyugal, llamado a entregarse en plenitud personal. [...] Esta diferencia antropológica y moral entre la anticoncepción y el recurso a los ritmos periódicos implica [...] dos concepciones de la persona y de la sexualidad humana irreconciliables entre sí» (FC 32).
Gn 38, 18
1295 Por medio de esta unción, el confirmando recibe "la marca", el sello del Espíritu Santo. El sello es el símbolo de la persona (cf. Gn 38,18; Ct 8,9), signo de su autoridad (cf. Gn 41,42), de su propiedad sobre un objeto (cf. Dt 32,34) —por eso se marcaba a los soldados con el sello de su jefe y a los esclavos con el de su señor—; autentifica un acto jurídico (cf. 1 R 21,8) o un documento (cf. Jr 32,10) y lo hace, si es preciso, secreto (cf. Is 29,11).miembros de un mismo organismo y nos devoramos como lo harían las fieras» (San Juan Crisóstomo, In epistulam II ad Corinthios, homilía 27, 3-4).